Sin conceder mayor importancia al hecho, cabe mencionar que
desde que iniciamos nuestras investigaciones, localizamos el acta de
bautismo de Margarita, en el que se declara que no es hija del
matrimonio Maza, pero que fue adoptada inmediatamente que nació.
A ruego de algunos de sus descendientes, omitimos divulgar este
hecho, al que no dimos mayor importancia por lo que hace a su relación
con Juárez. Como se ha dado ya a conocer [el suceso] incluimos el acta
de bautismo en este volumen.
La adopción de los Maza fue cabal y generosa; incorporan a
Margarita a la familia sin enterarse sus contemporáneos, pues en ningún
documento o publicación se hace referencia ello.
Juárez no lo pudo ignorar porque al nacimiento de Margarita se
encontraba en la ciudad de Oaxaca y su hermana Josefa era la cocinera de
la familia Maza. Además, fue necesario que para algún trámite se tuviera
a la vista el acta de bautismo.
En el acta de matrimonio se hace constar expresamente que es
“hija legítima de don Antonio Maza y de doña Petra Parada”. Es
indudable que se redactó el acta en esa forma, con pleno conocimiento y
anuencia de Juárez, para evitar bochornos a la contrayente en una época
en que estos prejuicios tenían importancia. Pensamos que Margarita no
conoció las circunstancias de su origen.
Al divulgarse, no ha faltado quienes pretenden encontrar aparente
explicación al extraño caso del matrimonio de una bella señorita de
sociedad con un indígena; nos parece absurdo. Margarita era reconocida
como hija legítima y Juárez, con sus treinta y cinco años de edad, era ya
un abogado de prestigio con relieve social y político.
No hay que olvidar que Juárez buscó el cobijo de la casa de los
Maza en que su hermana fue sirviente de la familia y que él también
trabajó para ellos en servicios modestos. Esa difícil relación fue superada
en años posteriores, como lo prueba la correspondencia entre doña
Margarita y Juárez, y sus relaciones con su cuñado.
Tomando en cuenta su edad, y el hecho de que no vivió en
ambiente familiar, tuvo una compañera, Juana Rosa Chagoya, que le dio
dos hijos: Tereso y Susana.